martes, octubre 03, 2006

Invocando el nombre de Dios


En el nombre de Dios no, del Diablo!

Y cuando se derrame la sangre, y se cuenten los muertos, y en las calles de la Antequera esten recogiendo los cadaveres de hombres, mujeres, niños, y ancianos, y se formen las piras para quemarlos y prevenir brotes de infeccion, la suprema corte de justicia declarara gravemente que las leyes que protegen la vida y las garantias individuales "estan hechas con las patas", que solo protegen a "la gente de razon" (esto en la tierra de Juarez), y que aunque hubo genocidio no, no ven represion.

El almirante Marco Antonio Peyrot, padre de un diputado panista, al tomar armas contra el pueblo, deshonra la memoria del comodoro Azueta y la del hijo de este, el valiente cadete, que junto con el PUEBLO, defendieron tan valientemente Veracruz del invasor, los mismos a los que sirve ahora el gobierno gerencial de los apatridas.

Y con que autoridad moral se atreve Abascal a invocar el nombre de Dios? No fue el el mismo que mando a sus esbirros de gobernacion a intimidar a los abogados de los que habian sido abusados por el clero? Que no involucre a Dios en esto. Esto es cosa del Diablo y a la mejor ni ese señor se rebajaria a tal nivel.